En el futuro seremos puramente electrónicos, menciona
recientemente Ruper Murdoch al referirse al periodismo y en general a la
experiencia de leer un medio impreso. Para algunas generaciones que todavía
disfrutamos de la experiencia táctil, olfativa y visual de un libro o una
fotografía, las opciones se reducirán a los medios electrónicos.
En cuánto tiempo se produzca lo anterior en su totalidad, es
decir, que desaparezcan casi por completo los medios impresos, es una fecha que
puede llegar más rápido de lo que pensamos; sin embargo, es importante señalar
que el papel fundamental del uso de los medios electrónicos lo tienen las
diferentes generaciones y su disposición a la adopción y uso de los
dispositivos. Es innegable que quienes actualmente se niegan, por practicidad o
falta de conocimiento, al uso de los medios electrónicos, abrirán paso a las
nuevas generaciones, para las que esto ya no será un problema. Será entonces
cuando los medios electrónicos sean la opción generalizada.
Según los estudios de IAB (Interactive Adversiting Bureau), el
92% de los cibernautas usan Facebook como red social y el 70% realiza compras
por Internet. Sin embargo, hoy en día, el impacto de los medios digitales no radica
en cuántas personas ya hacen uso de las redes sociales, buscan información en
Internet o simplemente se encuentran conectados a la misma; sino en cuántos ya
se encuentran conectados y haciendo uso de estos medios. En ese sentido,
estamos en pañales comparados con otros países. Según datos del Banco Mundial,
sólo el 30% de la población en México está haciendo uso de Internet.
En este sentido, empresas dedicadas a los medios impresos,
marcas, diseñadores y emprendedores tienen tiempo suficiente para hacer pruebas
sobre sus productos en este 30% de la población. Hay que recordar que quien
pega primero, pega dos veces, y para cuando más del 50% de la población ya esté
conectada, serán ellos quienes estén por encima de los que apenas estén
empezando a hacer pruebas en estos medios de comunicación. Aunado a lo
anterior, desgraciadamente, aún no se han hecho suficientes estudios sobre el
comportamiento del consumidor en estos medios, lo cual lleva a muchos
empresarios a aprender con base en la prueba y el error. El campo para la
investigación está abierto, hacen falta candidatos interesados.