Hace ya dos años que nos despertamos con la noticia de que
Heineken compraba FEMSA Cerveza. Para algunos significó el fin de toda una
dinastía mexicana en la producción de esta bebida, y para otros, una jugada
inteligente.
Hoy en día las ventas y fusiones siguen, y nos guste o no,
significan estrategias significativas para eliminar a un competidor importante,
para incursionar en un mercado desconocido, para abaratar un poco los costos de
producción o para obtener más dividendos mediante la compra de diferentes compañías
bajo la sombra de un fondo. Al fin y al cabo, estamos hablando de estrategias
comerciales que benefician a uno o a ambos competidores.
Líder en la producción de pan en México, Bimbo deseaba
incursionar en el mercado estadounidense. Su estrategia fue comprar a sus
competidores, pero no para desaparecer sus marcas. Con una estrategia bien
definida, el gigante del pan fresco conservó las marcas de sus competidores que ya contaban con la
preferencia de los consumidores estadounidenses y con ello se convirtió en el poseedor
del 52% del mercado de pan fresco en el país vecino.
A veces, una marca poderosa, compra otra para incursionar en
un mercado desconocido y en el que no tiene experiencia. Este es el caso de la
Costeña, que está por consolidar la compra de Fritos Totis para hacerle la
competencia a Sabritas y Barcel desde un nada despreciable tercer lugar en la
producción de botanas saladas en el país.
Con el objetivo de reducir costos de producción, Grupo
Herdez fusionó su empresa de condimentos en polvo Solo Doña María con Hormel
Alimentos. La jugada resultó en un incremento de sus pasivos en 3.1 veces, pero
no sólo eso, sino que también logró que sus costos de producción disminuyeran
significativamente.
Otra fusión es la de
Anheuser-Busch InBev (ABI) y Grupo Modelo. La empresa no se conformó con el
50.35% que ya poseía de la mexicana, y ahora adquirió el control de la
cervecera en un 100%. Sin embargo, hoy en día no llama tanto la atención la
fusión de estas firmas, sino la especulación que desencadenó la noticia en la
bolsa de valores y que hizo que las acciones de Grupo Modelo subieran en un
19.3%. Para algunos fue una estrategia para elevar el precio de venta de la
empresa y para otros, solamente el descuido de un informante que propagó la
noticia.
Otras empresas deciden vender su marcas a corporativos mucho
más exitosos para que las manejen y las hagan crecer. Uno de estos
coroporativos es Taco Holding, que posee las marcas Sbarro, de comida italiana,
Café Diletto, Neve Gelato, Arrachera House, Krispy Kreme y Sixties Burger. La
estrategia de Taco Holding es adquirir
empresas y formar un grupo con el fin de aumentar la escala de las operaciones,
generar eficiencias, ganancias y en un futuro figurar en el mercado de valores.
Como vemos, no siempre la venta de alguna empresa significa
una pérdida. Más bien son estrategias que manejan las empresas vendedoras o
compradoras con el objetivo de obtener mayores dividendos.