En la anterior columna les comentaba un poco de las diferentes tradiciones de la época decembrina en Alemania. Sobre los mercados navideños, los deportes de inviernoy la cena de Navidad.
Nos
quedamos en el “Christstollen”, un
pan dulce elaborado con mantequilla, pasas, frutos secos, almendras, nueces y que
está cubierto de azúcar. Simplemente no puede faltar en la mesa durante la
época de adviento y por supuesto como postre en Navidad. Y es que se dice que
este tradicional pan alemán se originó hace unos 600 años en la ciudad de
Dresden. Su forma es como la de un niño envuelto en pañales. Es un pan que
puede ser guardado durante mucho tiempo y es por eso que se puede comprar con
anticipación. En esta ocasión, sólamente para la temporada de adviento y Navidad,
compramos 5 panes de un kilo cada uno. Ya sé que suena un poco descabellado,
pero es verdad. He aquí la importancia de este pan durante las celebraciones
decembrinas.
Y es que ya
nos pasó el año pasado que durante el adviento nos acabamos los Christollen que
teníamos y para el día más importante, ya no quedaba más que un pedazo. Así es
que una semana antes de la cena, salíamos todos los días a buscar en varias
tiendas el dichoso pan y no encontrábamos nada sino las versiones más modernas
que a la mayoría no gustan.... Una verdadera tragedia. Y no exagero. Mi esposo
se sentía culpable y enojado. Yo la verdad no le había dado tanta importancia
al asunto hasta ese día. En las llamadas telefónicas para ultimar los detalles
de la cena, evitábamos mencionar que no habíamos encontrado el pan (que nos
había tocado a nosotros), pues pensábamos que lo encontraríamos alguno de esos
días en alguna tienda. Pero no encontramos nada, salvo los que ya nadie quiso,
y tuvimos que compartir nuestra derrota. Fue enconces que mi suegra, indignada,
solucionó el problema y llegó a la cena con un pequeño pan de unos 250 gramos
que había guardado para las “emergencias”.
Otra
tradición que puede dejar a muchos en la bancarota, es la de los regalos. La
costumbre marca que no se regala uno, sino varios obsequios de una persona a la
otra. Así es que uno puede recibir presentes de diferentes tamaños y precios de
parte de una misma persona. Obviamente que los más felices son los niños,
quienes hacen una larga lista de los juguetes que les gustaría recibir en “Weihnachten” (Navidad) por parte del “Christkind” (niño Dios), y que no recibieron durante el “Nikolaustag” (el día de San Nicolás). Y
es que los ríos de regalos no inician con la Navidad, sino el 6 de diciembre
con la celebración de “St. Nikolaus”
(San Nicolás o Santa Claus). En esta última, una de las condiciones para
recibir los regalos es que los niños limpien sus zapatos la noche del 5 de
diciembre para así poder recibir sus regalos a la mañana siguiente. Los niños
que se portaron mal durante el año o que no limpiaron sus zapatos el día
anterior, reciben sólo un pedazo de escoba como regalo.
Bueno, ya
no les cuento más porque no me alcanza el espacio. Deseo sinceramente que esta
Navidad la pasen rodeados de su familia disfrutando de mucha paz y armonía. Reciban
un abrazo afectuoso y que tengan un excelente inicio de semana.